What Madrid is doing to save water – Part 3

Hoy descubrimos cómo la ciudad se adapta a los cambios climáticos

Gestionar el consumo de agua de forma inteligente hoy en día también significa adaptarse a las condiciones ambientales externas e introducir continuamente innovaciones que han demostrado ser eficaces para hacer posible un estilo de vida urbano sostenible. Las administraciones municipales centran cada vez más su atención en las nuevas tecnologías, procesos y métodos que se están introduciendo en el mercado, y Madrid no es una excepción.

Ya hemos visto lo que pueden hacer los vecinos para reducir el consumo de agua y cómo las autoridades han encontrado la forma de aprovechar el ciclo completo del agua en la ciudad. Hoy veremos cómo se ha utilizado la tecnología innovadora para aprovechar la superposición entre el agua, el medio ambiente y la energía.

Los recursos hídricos pueden ser tanto un laboratorio como una herramienta en los esfuerzos contra el cambio climático

A medida que ha aumentado el conocimiento sobre el impacto humano en los ecosistemas naturales, también lo han hecho los avances en tecnologías que tienen como objetivo imitar los ciclos naturales del medio ambiente. Una de estas adaptaciones ha sido la instalación de Sistemas de Drenaje Urbano Sostenible (SUDS) que recogen las aguas pluviales y evitan su desbordamiento al alcantarillado, evitando así inundaciones y escorrentías del suelo hacia los cuerpos de agua.

Otra forma de prevenir las inundaciones es la construcción de estanques de tormentas que tengan la capacidad de recolectar el exceso de las lluvias torrenciales y liberarlo gradualmente al sistema de alcantarillado para no sobrecargar su capacidad ni la capacidad de las plantas de tratamiento de agua.

¿Qué pasa con el agua que va por el desagüe de tu ducha? Normalmente se ha tratado como cualquier otra agua residual, pero esta agua procedente del uso doméstico contiene energía térmica que se puede utilizar. Esto es precisamente lo que se está haciendo para calentar el espacio interior de la piscina cubierta del Polideportivo Moratalaz. Esto, a su vez, conduce a ahorros en combustible para calefacción y menos emisiones de CO2 a la atmósfera.

Las plantas de tratamiento de agua se pueden utilizar para generar su propia energía convirtiéndolas en entidades climáticamente neutrales. Esto se hace de dos formas. Por un lado, el tratamiento del agua libera gas metano que se utiliza para calentar. Luego está la corriente de flujo de agua que se puede utilizar para generar electricidad.

Hay incluso más cuando se trata de aguas residuales. Después del proceso de tratamiento, queda una sustancia de lodo que es valiosa en la agricultura como fertilizante. Sin embargo, cuando todavía está húmedo es más pesado, oloroso y voluminoso, por lo que existen dos plantas de secado térmico en Madrid donde este material se seca hasta que su masa se reduce y concentra, lo que facilita su transporte. Y menos transporte significa menos emisiones nocivas.

Y finalmente, cuando las autoridades urbanas diseñan las áreas verdes y parques de la ciudad, prefieren utilizar plantas nativas en armonía con el ecosistema local, ya que requieren menos agua y son más resistentes a las condiciones climáticas locales.